La Integración Económica
Generalmente, cuando se
habla de la integración, se refiere a la integración económica, ya que este
propósito es el que más influye en la integración de naciones independientes. La integración económica está compuesta del
comercio, del flujo de capital, del flujo de personas o labor y también la
abolición de barreras al comercio libre.
La integración económica puede tener uno de dos propósitos: el
establecimiento de un mercado común o un área de comercio libre. Esta toma ventaja de la proximidad geográfica
y la naturaleza complementaria del desarrollo económico y tecnológico entre
países vecinos. Puede estar filosóficamente opuesta a la estimulación de
ciertas industrias, limitación de algunas importaciones, y a la imposición de
salarios mínimos, entre otras.
La integración económica
puede definirse como:
La organización de un
grupo de países con el fin de mejorar el intercambio comercial en el marco de
sus territorios. Los objetivos principales son la eliminación de los obstáculos
al comercio y a la libre circulación de bienes, mercancías y personas; la
reducción de los costos de transporte, así como la implementación de políticas
comunes en distintos sectores de la economía. La integración en bloques supone
privilegiar el comercio por proximidad o contigüidad física, por lo que se
establecen también tarifas o aranceles externos a los países no miembros. Al
establecerse políticas comunes para distintos sectores de la actividad
económica, incluso para el área educativa, se busca no sólo incrementar el
comercio entre los países miembros, sino también alivianar los riesgos que
generan situaciones de incertidumbre en la economía global.
"Integración
económica es el término usado para describir los distintos aspectos mediante
los cuales las economías son integradas. Cuando la integración económica
aumenta, las barreras al comercio entre mercados disminuyen. La economía más
integrada o consolidada actualmente, entre naciones independientes, es la Unión
Europea y su zona 'Euro'".
La Integración Económica
es el proceso mediante el cual los países van eliminando esas características
diferenciales. Técnicamente podrían irse eliminando entre todos los países,
para ir hacia una "economía mundial integrada", pero por razones políticas
y económicas los procesos de integración tienen lugar de forma parcial, es
decir, implicando a un número de países normalmente reducido. Se dice entonces
que asistimos a un proceso de regionalización, especialmente cuando los avances
en la integración afectan a países de un mismo ámbito geográfico. La CE y el NAFTA
son los casos más obvios.
Características de los
procesos de integración:
Jorge Mariño (1999: 113)
ha establecido ciertas características esenciales a todo proceso de integración
regional, las cuales mencionaremos a continuación con la finalidad de
establecer una generalización. Estas características son:
Los sujetos son los
Estados soberanos
- Los Estados emprenden el proceso integrador en forma voluntaria y deliberada
- Como todo proceso -aún más, con la complejidad del caso al que se hace referencia- se debe avanzar por etapas, es decir, el proceso debe ser gradual.
- Las etapas deben ser cada vez más profundas y dispersas; de allí la necesidad de la progresividad y la convergencia del proceso.
- Por último, el proceso de integración se inicia con acercamientos económicos, pero lentamente y dependiendo de cada proceso -conforme a lo estipulado por los Estados miembros-, la agenda va abarcando e incluyendo nuevos temas de las áreas sociales, culturales, jurídicas, y hasta políticas de los países miembros.